Un compromiso siempre va acompañado de mucha alegría y ganas de festejar, pero al mismo tiempo de muchas tareas por hacer, y actividades que organizar.
Esto va acompañado de decisiones muy importantes, que nos pueden estresar en exceso e incluso esto puede representar muchos problemas con nuestra pareja.
La primera recomendación, es disfrutar todo el proceso, y tener mucha comunicación y confianza, para ser muy claros con lo que se busca lograr en su boda.
La segunda recomendación sería, no tener aspiraciones muy elevadas, y esto es en relación, de tener claro cual es nuestro presupuesto, y apegarnos muy bien a el, el querer algo que no tenemos contemplado, puede complicar nuestra planeación, y hacernos entrar en conflicto.
Dentro de nuestro presupuesto, hay que definir cual es la suma total que estamos dispuestos a invertir en nuestra boda, hacer un listado de todas nuestras ideas y cómo esperamos que sea, y así poder marcar que es lo más relevante e imprescindible para nosotros
Tercero, debemos darnos a la tarea de investigar algunas recomendaciones y proveedores que sean de nuestro agrado y sobre todo que nos puedan ofrecer lo que estamos buscando y esperando, pero el buscarlos, no lo es todo, debemos solicitar presupuestos y realizar comparaciones con otros proveedores, para tener referentes y ahora si poder tomar una decisión.
Es bueno investigar, además de tener comentarios y revisar evaluaciones, hay que buscar fotos de lo que han hecho dichos proveedores, e incluso solicitar pruebas o muestras, para asegurarnos de la calidad.
Cuarto, haz una lista de invitados, para poder cerciorarte, de cuantas personas estarán consideradas y obtener totales más reales, y poder cotejar con nuestro presupuesto.
Estos son solo algunos consejos, que te pueden ayudar y orientar, para iniciar con la planeación de tu boda, pero recuerda, lo más importante es que tu y tu pareja sean felices y quieran disfrutar su boda al máximo.
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